Los acusados eran sobrinos nietos de un profesional piquense y sus herederos, pero la aparición de un hijo biológico del fallecido cambió la situación:  

 

En los Tribunales de Pico comenzó este lunes el juicio oral y público contra dos profesionales radicados en Mendoza, herederos testamentarios de un bioquímico piquense, que ordenaron cremar su cuerpo y el de sus padres para evitar compartir la herencia con un vecino de esta ciudad que se enteró ser hijo biológico del fallecido y reclamó su parte.

El caso se originó en plena pandemia, cuando Darío Oscar Aleman se enteró que era hijo del bioquímico Oscar Cadenas, fallecido en el año 2012.

Cuando el piquense inició el trámite de filiación para heredar como único hijo, los sobrinos nietos mendocinos -que eran herederos por testamento- supuestamente tramitaron de urgencia la cremación del cuerpo de Cadenas, y también de sus padres, para no perder gran parte de una importante herencia.

Lo hicieron mientras existía una orden judicial para preservar el cuerpo.

Los imputados son Alejandro Daniel Ander, ingeniero agrónomo de 47 años, y su hermano Guillermo Federico Ander, psicólogo de 56 años, ambos radicados en la provincia de Mendoza.

Se les acusa de "supresión de estado civil y de la identidad" y "destrucción de medios de prueba, en concurso real", delitos que tienen una pena en expectativa de 1 a 4 años de prisión.

En paralelo, se tramita una causa en la Justicia Civil donde ya existe un fallo favor del piquense que asegura ser el hijo del conocido bioquímico Oscar Cadenas.

El juez Marcelo Pagano preside el debate oral y público, que se prevé tendrá al menos tres audiencias. Sebastián Rawson Paz lleva adelante la acusación junto al fiscal general, Armando Agüero, mientras que el abogado Pedro Febre representa a la Querella. La Defensa la ejercen los abogados santarroseños Rodrigo Villa (por Guillermo Ander) y Seila Domínguez Ardohain.

Debate

Durante las audiencias en el palacio de Tribunales de General Pico desfilarán varios testigos solicitados por las partes, entre los que se encuentran abogados, empleados municipales, entre otros.

Al inicio del juicio, el juez consultó a los acusados si tenían pensado declarar y respondieron que sí, pero adelantaron que lo harían más adelante.

En su alegato de apertura, el fiscal Rawson Paz acusó a los hermanos de Ander de "haber tornado incierto el estado civil" de Darío Alomar, al destruir las pruebas fundamentales para establecer el lazo sanguíneo del vecino piquense con Cadenas, cuando ordenaron la cremación de su cuerpo y el de sus padres y supuestos abuelos del demandante.

Cadenas falleció el 4 de marzo de 2012 y su testamento dejaba sus bienes a nombre de los hermanos mendocinos.

Pero Alomar presentó en el año 2020 el trámite judicial de filiación para establecer su identidad real y tomar posesión del 80% de los bienes heredados por los sobrinos nietos de Mendoza.

Ante dicha presentación, la Justicia local dictó una medida cautelar de filiación con fecha en mayo del año 2020, por la cual se ordenaba preservar los restos del bioquímico.

Supuestamente enterados de esta acción, en plena pandemia, los hermanos mendocinos tramitaron vía mail y telefónica la cremación de Cadenas y de sus padres, por lo que lograron que los restos fueran sacados del Cementerio Municipal y trasladados al Cementerio privado para su incineración el día 7 de octubre de 2020.

Ante el hecho consumado, se abre otro eventual capítulo judicial contra el Municipio piquense por la cremación del cuerpo habiendo una orden judicial.

La Defensa de los acusados apuntó a la falta de la prueba fundamental para demostrar el lazo sanguíneo del demandante con el fallecido, a pesar del dictamen existente en la causa civil que determina la paternidad de Cadenas por "indicios".

Darío Oscar Alemán fue el primer testigo en declarar y recordó que su madre, tiempo después de la muerte de Cadenas, le había confesado que era hijo extramatrimonial del bioquímico.

"Me robaron la identidad", aseguró el denunciante al definir la acción de los demandados.